Desde el departamento de Atención a la Grave Exclusión de Caritas Diocesana continuamos dando pasos en el desarrollo de la formación como uno de los pilares que nos definen.
Tras un diagnóstico de necesidades formativas desarrollado desde la Coordinadora de Exclusión que integra a los proyectos de calle de las Caritas parroquiales y el Centro Amigo de Cáritas Diocesana de Sevilla, se establecieron prioridades formativas para el curso 2019 que incluían necesidades referidas a salud mental.
En esa línea, bajo el título “Atención de personas que padecen con trastorno mental grave”, se planteó un ciclo formativo, dirigido a los agentes voluntarios que prestan su servicio en los diferentes proyectos que conforman el departamento y realizado con la colaboración del ETIC, equipo de las unidades de salud mental que trabaja directamente en la calle.
La demanda de asistencia desbordó todas las expectativas, obligando a la comisión organizadora a desdoblar la iniciativa en dos grupos. La asistencia ha superado el centenar de participantes.
Los voluntarios de los diferentes proyectos de intervención con personas en situación de exclusión social grave participaron durante los meses de febrero y marzo en sesiones donde se les posibilitó el compartir inquietudes, fortalezas y retos en torno al acompañamiento de personas con problemáticas relacionadas con la salud mental.
En esta línea, adquirimos el compromiso de asumir las situaciones de Salud Mental como una parte fundamental en la reflexión que vamos construyendo como equipos de atención a personas sin hogar, incorporándola a nuestra formación y a nuestras claves de trabajo diario, recogiendo, de la misma forma, las inquietudes de los espacios de coordinación de Cáritas en los niveles regional y confederal.